La vaselina es un aceite derivado del petróleo que tiene la virtud de mejorar la hidratación de la piel y retener el agua evitando que haya una pérdida de hidratación. Normalmente la podemos identificar en el INCI (Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos) como petrolatum o petrolatum jelly.
Su aspecto es denso, carente de olor y su color puede variar entre el amarillento, transparente o blanco dependiendo de cuál haya sido el proceso de refinación empleado para su obtención.
Según los expertos en dermatología, cuenta con propiedades emolientes ya que calma las pieles secas, las suaviza y las protege. Sin duda, el uso más extendido de la vaselina suele estar relacionado con el cuidado de los labios aunque también ayuda a combatir los talones secos y agrietados.